sábado, 12 de marzo de 2011

Relatos de Piratas I

Estado de navegación: Desvariando
Últimas notas: Las de los cuentos a bordo
Preferentemente escuchando: A pirate life
Y bebiendo: Ron... mucho ron

EL BARCO FANTASMA



¿Lo habéis visto cruzar, furtivo
como un ladrón a deshora,
o como un fantasma deslizando
su figura de niebla o de sombra,
cruzar con sus cuatro mástiles,
su borroso mascarón de proa,
y su inconfundible enseña
de raído color de ultratumba?

Habitantes de los altos cerros,
audaces hijos de la orilla,
nietos y bisniestos de corsarios,
prole de los lobos de la mar,

¿Lo habéis visto, envuelto en vaho, en humo,
envuelto en el aliento del dragón,
lo habéis visto, navío fantasma
cruzar a las tardías en punto,
a la hora de ningún reloj?

Sí, lo hemos visto, solemnes,
o llenos de secreto pavor,
atravesar con su tripulación
de inmóviles sombras, de nautas
extáticos sobre cubierta,
irreales en la gris irrealidad.

Puntual como sólo las ánimas
a la hora de los conjuros,
cuarenta metros de eslora
y cuatro de calado en las aguas
de un mar como ningún otro mar,
de un puerto como ningún otro puerto,
de un pueblo como ningún pueblo más.

¿Quiénes cruzan, hijos de la orilla,
quiénes hienden la niebla abismal
con una proa de inmóvil efigie,
en un navío de irreal realidad?

¿No reconocéis vuestra enseña,
no reconocéis en el mástil
el pendón de espuma y marejada,
la mano agitándose en el viento,
el bizarro perfil del Patriarca
haciéndose a la mar en su bajel?

¿No reconocéis, prole oceánica,
progenie de los lobos de la mar,
no reconocéis en los rostros
de las sombras inmóviles cruzando,
vuestro perfil en sal esculpido,
vuestro linaje de espuma y tempestad?

A ninguna de las horas terrestres,
el navío fantasma, a través
de la niebla onírica, del vaho
manando de las fauces del dragón,
cruzando la retina lárica,
internándose en la memoria tribal,
y sobre el puente, asido al timón,
el Patriarca de indomable temple,
el capitán de la vieja hermandad,
a través de sueños, tormentas,
arrecifes, niebla equinoccial,
con su velamen desplegado
a los vientos de la Oceanía,
a los vendavales de ultratumba,
al soplo de su estirpe inmemorial.

ULISES VARSOVIA

Navegando en barcos de papel creados de los mejores cuentos y las más maravillosas partituras… Ahoy!
Capitana Vudulicius Lost

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